
Todas las personas necesitamos motivación para cualquier actividad que realicemos, y más aún si queremos hacerla de la mejor forma posible
Los deportes no son la excepción, para poder realizar actividades deportivas necesitamos motivación deportiva, y de ella dependerán los resultados.
¿Qué es la motivación deportiva?
La motivación deportiva es apenas uno de los varios tipos de motivación que pueden existir. Si deseas saber más sobre los otros tipos de motivación, no dejes de leer este artículo sobre los tipos de motivación donde desarrollamos ese tema a profundidad.
La motivación deportiva es la fuerza, el ímpetu con el que nos dedicamos a realizar actividades deportivas, es decir, las ganas y el interés que depositamos al realizar un deporte.
¿Existen diferentes tipos de motivación deportiva?
La motivación deportiva es un tipo de motivación, pero a su vez hay diferentes maneras de ver la motivación en los deportes.
Motivación Extrínseca en los deportes: Es cuando la verdadera motivación se centra, no en la actividad deportiva como tal, sino en algún premio o recompensa que se recibirá por ella. Por ejemplo, un maratón en el que el ganador o el primero en llegar a la meta, recibirá una cantidad de dinero o algún incentivo material.
Motivación Intrínseca en los deportes: Es cuando lo que motiva al atleta no es ningún premio, sino la mera satisfacción de practicar el deporte. Algunos deportistas manifiestan que su motivación intrínseca puede basarse en ganar, mientras que otros confiesan que con solo participar ya se sienten satisfechos y realizados.
Si deseas aprender más sobre este tipo de motivación aplicada a diferentes escenarios de la vida y no solo en los deportes, puedes hacerlo a través de este artículo (motivación intrínseca) donde desarrollamos el tema con mayor profundidad.
Motivación positiva en los deportes: La motivación positiva es la que hemos descrito hasta ahora con los ejemplos anteriores, es decir, esa motivación que en el caso de los deportes, busca un resultado agradable, alcanzar una meta deseada, que puede ser ambiciosa como obtener un premio o ganar un partido, o simplemente basarse en la mera satisfacción de practicar un deporte.
Motivación Negativa en los deportes: este tipo de motivación es la que nos impulsa a hacer algo para evitar una consecuencia indeseable. Por ejemplo: Evitar una sanción por parte de un organismo deportivo, o incluso hasta por salud, para prevenir algún tipo de enfermedad o reducir sus síntomas.
Ejemplos de motivación deportiva
A continuación te presentamos tres ejemplos muy puntuales de motivación deportiva que pueden servirte de inspiración para emprender tu propio camino hacia la gloria o incluso para tu vida diaria.
Jim Abbot fue un jugador de grandes ligas que participó en varios equipos en MLB, el espectáculo mundial de beisbol más importante desde hace más de un siglo. Jim Abbot jugó durante su carrera activa como lanzador, posición muy exigente, y lo hizo con la particularidad de tener solo una mano. Jim abbot nació con una sola mano, y eso no le impidió convertirse en profesional, y no lo hizo con ayuda de ningún tipo de prótesis. Jim abbot desarrolló una propia manera de lanzar y jugar que le permitió, no solo llegar a profesional sino además establecerse e incluso lanzar un juego sin permitir hits ni carreras, algo que para los entendidos del beisbol es una hazaña muy difícil tan es así que solo la logran uno de cada mil lanzadores que llega a las grandes ligas.
Maickel Melamed, por otro lado, es un maratonista con diversidad funcional, cuya condición de discapacitado no le impidió, no correr la archi famosa maratón de New York, sino que además es filósofo, profesor universitario y orador motivacional. Todo un ejemplo de que la adversidad no debe ser una excusa para detenerte sin todo lo opuesto, factor de motivación para seguir adelante.
Aaron Judge es un jugador de beísbol de renombre en la actualidad, y a diferencia de los ejemplos anteriores, no posee ninguna discapacidad. Es todo un profesional exitoso en lo que mejor sabe hacer: jugar beisbol.
Si hoy todavía se está hablando de lo que hiciste ayer, es porque entonces hoy no has hecho nada importante todavía
Por esa frase es que incluimos a Aaron Judge entre los grandes ejemplos de motivación deportiva, porque en sus palabras nos invita a ser cada día mejores, incluso cuando nuestra carrera deportiva pueda parecer absolutamente exitosa, siempre hay que buscar mejorar.
Consejos para aumentar tu motivación deportiva
Si estás leyendo este artículo es porque de algún modo estás buscando mejorar tu motivación deportiva, y por ello te felicitamos, es de grandes buscar mejorar.
A continuación te daremos algunos consejos que te ayudaran aumentar tu motivación deportiva:
Define tus objetivos: una de las mayores faltas de motivación en los deportes es el hecho de no tener una meta clara. Si no sabes por qué haces las cosas, es muy probable que no tengas el mayor interés en ellas, y bien se sabe que cuando algo no nos interesa, difícilmente lo haremos, y si lo hacemos, no será precisamente de la mejor manera posible.
Mantén y eleva tu autoconfianza: Varios expertos en psicología deportiva afirman que existe algo llamado “momentum”, definido como el fenómeno o proceso en el que el deportista entra en un estado mental particular, estado en el que su confianza puede llegar al nivel máximo, así como tocar fondo y desaparecer por completo.
Cuando un atleta pierde la seguridad, la confianza en sí mismo, no importa cuán bueno sea si él mismo no lo cree. Cree ti, en tus capacidades. No decimos que te engañes a ti mismo, sino todo lo contrario. El consejo que te damos es que reconozcas todo de lo que eres capaz y lo tengas siempre en mente para que no pierdas esa confianza que te llevará a alcanzar tus metas como deportista.
Nunca te rindas: Según algunos analistas deportivos, existen dos tipos de atletas; los que se retiran, y los que son retirados. Nuestro consejo al respecto es que no seas el que se retira, nunca te rindas, no dejes que nada ni nadie te saque de competencia hasta que sea verdaderamente imposible continuar. No olvides que por mucho talento que tengas, sino posees perseverancia y disciplina, si no entrenas tan duro y seguido como puedas, no llegarás tan lejos como de verdad puedes hacerlos. Prueba tus límites, no te quedes con la duda.
Sal de tu zona de confort: Este consejo es tan trillado como efectivo. Siempre se habla de que hay que salir de la dichosa zona de confort, y se habla tanto de eso que incluso ya da un poco de fastidio, pero la verdad es que es algo muy efectivo, solo que no todo mundo logra ejecutarlo de la mejor manera posible.
Cuando te sientes demasiado cómodo es el mejor momento para cambiar
dijo alguna vez el actor y director de cine, Clint Eastwood. El cambio es la ley natural de la vida, nos lo han dicho los científicos desde hace muchos años, y hoy te lo queremos recordar como un consejo para mejorar o aumentar tu motivación deportiva.
Cambia tu rutina de ejercicios de vez en cuando, prueba cosas distintas aún cuando hayas obtenido buenos resultados, porque si te estancas en un único plan de trabajo, nunca sabrás si hay otros métodos que te hagan llegar todavía más lejos.
Aprende y aprovecha los beneficios del descanso: cada vez son más los atletas que se lesionan por sobreentrenamiento y muchos más los que de algún modo terminan por abandonar sus actividades deportivas por sentirse estresados, abrumados, agotados física y mentalmente.
Es cierto que no hay que rendirse, pero descansar es necesario. Descansar no significa abandonar tus metas, es solo tomar un tiempo que hace falta para recuperarte tanto en tu cuerpo como en tu mente y emociones.
Alejarse de la cancha y del gimnasio por un breve tiempo siempre será necesario, para despejar la mente, darle tiempo al cuerpo de recuperarse, y estar listos de nuevo para la acción en las mejores condiciones posibles.
A manera de conclusión queremos decirte que ningún consejo es útil si no lo consideras de verdad provechoso. Ningún atleta llega a ser realmente bueno si él mismo no cree que lo sea. No seas tú quien ponga los límites, prueba qué tan fuerte eres, qué tan lejos puedes llegar, y la única manera de lograrlo es intentándolo.